¿A quién no le gusta ver muchos “me gusta”? Se siente bien, como si confirmara que lo estamos haciendo increíble. Pero ojo: los likes pueden ser un espejismo. Te levantan el ego, pero rara vez te dicen si tu estrategia funciona o si estás construyendo algo que trascienda.
Lo importante no es inflar reportes bonitos, sino tomar decisiones con datos reales.
Likes vs. lo que de verdad importa
Un like es rápido: un clic y listo. No significa que leyeron tu texto, que vieron tu video hasta el final o que conectaron contigo. Y ahí está la trampa: quedarte solo con esa métrica puede hacerte creer que estás creciendo, cuando en realidad no.
Las métricas que sí te dicen la verdad
- Comentarios, guardados y compartidos: Hablan de un contenido que generó reacción, reflexión o acción.
- Alcance real: Saber a cuántas personas llegas y si son las correctas.
- Retención en video: Que te vean completo vale más que mil likes al inicio.
- Clics y conversiones: Cuando alguien pasa de “me gusta” a dar un paso más: visitar tu web, comprar, suscribirse.
Cómo usarlas a tu favor
- Ten claro tu objetivo: ¿quieres comunidad, ventas, autoridad?
- Observa patrones, no solo un post que explotó.
- Experimenta con formatos y horarios, y deja que los datos hablen.
La idea final
Los likes no son malos, pero son solo la superficie. Si quieres crecer en serio, mide aquello que refleja impacto real. Porque al final, no se trata de cuántos corazones tiene tu publicación, sino de cuántas personas se movieron gracias a ella.

